Por: Pablo Enrique Bohórquez Duque
La Florida, uno de los sitios más turísticos que existe en la región, es conocido por ser de los lugares más visitados por deportistas de todas las edades, ya que allí se puede ver que se practica desde el fútbol y el microfútbol, hasta otros que fueron el inicio de lo que es el reconocimiento en el deporte colombiano, ‘el ciclismo’. Pues no solo tenemos grandes ciclistas en el país como el ‘Cochise’ Rodríguez, o Santiago Botero, sino que poco a poco este deporte se ha ido acrecentando, y es aquí en donde encontramos al señor Gonzalo Flórez, a quien la edad no le impide mantener una rutina montado en su bicicleta.
Don Gonzalo, a sus 75 años de edad, y quien vive en el barrio Corales ubicado en la ciudad de Pereira, sale día de por medio en su ‘niña consentida’ como él mismo le dice a recorrer el mundo, tiene claro que su salida es desde el lugar en el que vive, pero no el lugar a donde irá, pues han sido muchos los lados a donde ha viajado, entre los que han estado: Santa Rosa de Cabal, Alcalá, Cartago, Zarzal, Chinchina, El Pital de Combia, entre muchos otros.
Cuando se trata de su bicicleta, Don Gonzalo comenta “Lo que me pida la bici en cuanto a reparaciones o arreglos, no tengo ningún problema en complacerla, ella es la luz de mis ojos, es mi vida, mi hija consentida, mi juguete preferido”.
Aunque prefiere salir a montar su bicicleta solo, Don Gonzalo siempre tiene presente que “Dios, la Virgen María, y su esposa que en paz descanse” son quienes lo iluminan en sus viajes. Pues montar en su ‘hija’ es su hobbie preferido, y esto debido a que desde niño siempre tuvo una para montar.
Actualmente su compañera inseparable lleva a su lado cerca de 20 años, en las cuales distintas anécdotas, historias, o una simple pinchada han hecho parte de su vivir.
Aunque el paso de los años en Don Gonzalo se ven, no es excusa para seguir trazando su historia de vida al lado de su ’consentida’. Sencillo, humilde y sobretodo respetuoso con la gente han hecho que poco a poco no solo los seres queridos lo quieran sino que sus amigos, nietos, sobrinos etc., quieran seguir su ejemplo, ese que como bien dicen por ahí, la edad no es impedimento en la práctica del deporte, y mucho menos si éste es en un aparato de dos ruedas y un manubrio que guían sus días de travesías.
“Ojalá y sean otros tantos añitos que la vida me permita poder seguir compartiendo y sobretodo montando en mi gran pasión, la bicicleta” así lo afirma Don Gonzalo con un tono de voz nostálgico.
No hay comentarios:
Publicar un comentario